01 enero 2008

El Día Que Murío Mi Sol y El Frio Habito Mí Corazón...

Noche tras noche buscando una vez mas poder encontrarme y con la idea de que no sea tarde para oler por ultima vez ese perfume de la noche que me hace arder, ahun con tantas estrellas que deslumbran mi visión no puedo dejarme ir y caer en la tentación, trato de no pensar, entrelazar las horas resulta tan dificil el tiempo pasa tan rapido y no se de lo que estoy hecho, cuando caminando me encuentro, el sol otra vez me da en la frente, otra vez no hay nada y la soledad del pasado es el presente que aplasta mí corazón y no da tregua a este dolor.

La suciedad, el silencio y la mente tan fría, el goze la satisfacción de tener un sentimiento tan profundo que quisiera pudiera explotar, con esa sensación de desesperación obstinado con lo predestinado pero conciliando el mal sembrado.

Los brazos ya no tienen fuerza para azotar, ni para abrazar el cuerpo que habita esta alma, quiero poder llegar al mar y ahy explotar...

Cada día que pasa siento mas las miradas, la persecución se vuelve descarada, ya no hay mas dizfraces, no se puede comprender el sufrimiento cuando no se ah sufrido, las personas nacen luego mueren y yo aquí sentado viendo como todo se va al fondo de no se que, ni siquiera se si es un fondo, quiero poder participar pero no hay nada que pueda hacer, aunque el corazón aguanta, estoy aquí con este nudo en la garganta, estoy a punto de llover de llover...

Odio a esta gente y no hay nada que pueda hacer para cambiarlo jamas podre superarlo, solo veo lo podrido de los seres que pisotean al mas debil, que no dan la mano al desamparado y que solo se aprovechan del mas desesperado para llenarse de hipocresia.
Es imposible mirarte de frente a los ojos, porque me da tanta rabia tu hipocresia y que te rias así de la vida.

No puedo parar de odiarte, ni de señalar tu porqueria, me vomito al ver tu hipocresia... Ya tengo el higado en la ruina...

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